La académica de Kinesiología de la Universidad Andrés Bello, Waleska Reyes, entrega consejos prácticos para disfrutar los últimos días de esquí y snowboard sin poner en riesgo tu salud física.

Con el cierre de la temporada de nieve, muchos aprovechan los últimos días para practicar deportes como el esquí y el snowboard. Sin embargo, estas disciplinas, aunque populares, representan una de las principales causas de lesiones musculoesqueléticas en invierno. La rodilla en el esquí y la muñeca en el snowboard son las zonas más vulnerables, aunque los hombros, tobillos y la columna también presentan riesgos frecuentes.
La académica de Kinesiología de la Universidad Andrés Bello, Waleska Reyes, advierte que la preparación física, el uso de equipo de protección y una técnica correcta son claves para prevenir accidentes. “La prevención parte antes de llegar a la nieve: entrenar, calentar y equiparse bien hace toda la diferencia”, señala la especialista, destacando la importancia de la responsabilidad individual en la práctica deportiva.
Entre las lesiones más comunes en la nieve está el daño en la rodilla, en particular la rotura del Ligamento Cruzado Anterior (LCA), típico en esquiadores por giros bruscos o caídas hacia atrás. En estos casos, Reyes recomienda fortalecer los cuádriceps e isquiotibiales, además de trabajar el equilibrio y verificar la correcta calibración de las fijaciones de esquí.
Otra zona vulnerable son los hombros, donde suelen producirse luxaciones y esguinces tras caídas con el brazo extendido o golpes directos. Para prevenir estas lesiones, la académica aconseja realizar ejercicios de estabilidad escapular y fortalecimiento muscular, lo que ayuda a dar soporte a la articulación.
En el snowboard, una de las fracturas más recurrentes es la del radio distal por caídas con la mano extendida, mientras que en el esquí aparece el llamado “pulgar del esquiador”, una lesión en el ligamento del dedo causada por el uso del bastón en una caída. El uso de muñequeras, el fortalecimiento de antebrazos y la práctica de técnicas de caída son medidas que reducen estos riesgos.
Finalmente, los esguinces de tobillo y los golpes en la columna también son frecuentes, especialmente en saltos o caídas de espalda. Para evitar complicaciones, Reyes recomienda trabajar el equilibrio y la propiocepción, usar botas que entreguen firmeza y, sobre todo, fortalecer el core y realizar calentamientos previos. De esta manera, es posible disfrutar de la nieve con seguridad y cerrar la temporada sin lesiones.